Análisis de Final Fantasy X

Hola a todos. Hoy os traigo un juego al que le tengo un cariño especial, Final Fantasy X. Con motivo del lanzamiento de su versión HD en PS3 y PSVITA, voy a analizar esta obra de arte. Antes de nada os aviso que no voy a poder ser imparcial. Fue el primer Final Fantasy que jugué y me llegó como ningún otro juego me había llegado. Así que vamos a ello.

HISTORIA

Nosotros controlamos a Tidus, un campeón del blitzball, un deporte bastante seguido en el lugar. Pues bien, por una serie de circunstancias, el protagonista viaja a Spira, la tierra a la que nos lleva Squaresoft en esta décima entrega de la saga. 

En este lugar ocurre que, cada cierto tiempo, una gran bestia llamada Sinh arrasa todo por donde pasa. La tradición dice que un invocador (en este caso Yuna) debe realizar un viaje con sus guardianes en el que conseguir poder suficiente para invocar al Eón Supremo y así vencer a la criatura. ¿Cuál es el problema? Sinh siempre vuelve. Esta misión únicamente busca la llamada Calma, el periodo de paz del que pueden disfrutar hasta que la bestia renazce. 

La historia como veis es muy buena. Sin embargo, todavía es más profunda. Las relaciones entre los guardianes, los fundamentalismos religiosos de Spira, las razones por las que Tidus aparece en esta tierra, la gente poderosa que se cruzará en nuestro camino y la historia del anterior Gran Invocador son algunas de las tramas que podremos ir descubriendo en FFX. 

La forma de contar la enrevesada historia, los personajes, las grabaciones, cada giro argumental. Simplemente magistral. Me gustaría detenerme más, pero tendría que dedicarle un reportaje a cada apartado. Lo único que os pido es que no veáis los trailers de la versión HD. Por favor. Hay uno en concreto que destripa toda la historia, del X y del X-2. Una verdadera pena, y algo incomprensible por parte de Square. 

APARTADO ARTÍSTICO

Como veis no le he llamado estética a este apartado, sería muy injusto no dedicarle unas líneas a la música de Nobuo Uematsu. Pero empecemos por el principio. Estéticamente fue una delicia. Las escenas de vídeo, como es costumbre en la saga, son muy espectaculares y más si pensamos en el año en el que se lanzó. En la parte jugable rendía bastante bien, aunque lógicamente estamos hablando de un juego de PS2. En el nuevo lanzamiento sí que se ha mejorado este aspecto, siendo bastante aceptable la conversión.  

A nivel de diseño es una auténtica pasada. Localizaciones muy variadas entre las que se encuentran playas, montañas nevadas, desiertos, prados y bosques llenos de luz. Quiero destacar el nivel de detalle de los personajes, los templos y las invocaciones. Precioso. Pero sobre todo muy original.

Musicalmente está muy por encima de la gran mayoría de juegos de la época, y de la actualidad. Para el análisis me he vuelto a poner las canciones y me han vuelto a emocionar. Qué piezas de piano, qué baladas. Es por estas cosas por las que le tengo tanto aprecio a este juego. 

JUGABILIDAD

FFX es un J-RPG. Esto quiere decir que los personajes van consiguiendo experiencia con los combates, con la cual vamos aprendiendo habilidades. Para ello, tenemos el Tablero de Esferas. La experiencia es el número de movimientos en el tablero y las habilidades son esferas que tenemos que conseguir para colocarlas en su lugar. En principio, cada personaje tiene un camino por donde ir en el tablero (Yuna magia blanca, Lulu magia negra, etc.), pero solo en principio, porque tendremos libertad absoluta en este sentido.  

De aquí pasamos al combate. Lucha por turnos, en la que tendremos comando atacar, habilidades y habilidades especiales o límites. Además, Yuna podrá invocar a los eones, los cuales podremos controlar como cualquier otro personaje, sustituyendo al equipo. 

Pero el juego también nos ofrece un montón de extras. Yo me río cada vez que oigo en los análisis que dura 50 horas. ¡¿50 horas?! Yo estuve unas 130 antes de acabar el juego. Hay carreras de chocobos, jefes finales ocultos, partidos de blitzball, objetos coleccionables y un sin fin de secretos por descubrir. Para llegar a todos estos lugares tenemos a nuestra disposición, a partir de un momento de la aventura, un barco volador que nos llevará por toda Spira. 

RESUMEN: 

Final Fantasy X tiene una historia profunda que te engancha y te emociona. Una tierra inmensa que poder explorar, Spira. Un apartado artístico estética y musicalmente magistral, que muy pocas veces te vas a encontrar en un videojuego. Y por supuesto una jugabilidad divertida, con combates completos y exigentes y un sin fin de extras y secretos por descubrir. Llegados a este punto la pregunta no es: ¿lo tendría que comprar? sino, ¿como no lo has jugado ya?